En medio de la rutina laboral, es fácil olvidar que nuestro cuerpo también necesita atención. Pasar horas frente a la pantalla sin moverte puede afectar tu bienestar y tu productividad. La solución es simple: incorporar pausas activas. Descubre cómo hacer pequeños cambios en tu día para sentirte mejor y rendir más.
No necesitas horas en el gimnasio para cuidar tu salud en el trabajo. Con solo unos minutos de pausas activas, puedes mejorar tu energía, reducir el estrés y aumentar tu concentración. ¡Muévete, respira y dale a tu cuerpo lo que necesita para funcionar al 100%!